En medio del movimiento del centro de Neiva, entre edificios gubernamentales y pasos apresurados, una joven huilense encontró en la cocina una oportunidad para transformar su vida. Se trata de Angie Catherine Peña Rodríguez, madre, emprendedora y pedagoga infantil de profesión, quien desde hace cinco meses lidera su propia cevichería ambulante: El Nene.
Con un carrito adaptado en forma de barco, ubicado estratégicamente en el Parque Santander, Angie ha conquistado el paladar de quienes transitan a diario por el centro de la ciudad. Su especialidad es el ceviche de camarón, un plato tradicional de las costas del Pacífico y el Caribe colombiano, que ella aprendió a preparar durante años de trabajo en reconocidas cevicherías.
Hoy, convertida en su propia jefa, combina los saberes populares con la pasión por el servicio. “El secreto está en no sobrecocer el camarón, hay que dejarlo rosadito y jugoso”, afirma con orgullo, mientras despacha con agilidad y carisma.
Su historia refleja la resiliencia de muchas mujeres huilenses que, ante las dificultades económicas, convierten el trabajo informal en un proyecto de vida digno, sostenible y con identidad regional. Un ejemplo de que el emprendimiento local, cuando se hace con corazón, también alimenta el tejido social.
